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El polvo en exceso puede envejecer la piel de tus zapatos, retíralo con frecuencia, si es un cuero afelpado usa un cepillo de cerda suave con movimientos en el sentido de la felpa, sino lo es retira el polvo con un paño blanco preferiblemente de franela.
Si tus zapatos llegan a mojarse, es recomendable limpiarlos con un paño blanco de franela húmedo, emparejando la superficie, y luego con uno seco, para retirar el exceso de humedad, después debes secarlos a la sombra, siempre apoyados en el talón, nunca en la punta.
Para mantener la apariencia de los cueros grasos, debes hidratarlos , es importante primero retirar el polvo con un cepillo suave o paño y luego aplicar de manera uniforme alguna crema especializada para este tipo de producto. Recuerda siempre aplicarlo en una dirección y no dejar excesos.
Para cuidar los yutes, que son 100% fibras naturales, más susceptibles a acumular polvo a mancharse por la humedad, el agua y un jabón suave van a ayudar, es importante hacerlo con paciencia, usando un paño blanco de franela en lugar de cepillo pues este genera frisa con el roce, humedecer el yute con un paño húmedo es el primer paso, luego aplicar la espuma del jabón suave con otro paño siempre en el mismo sentido y luego retirarla de la misma manera, lo dejarán listo para secar a la sombra.